Es una técnica de infiltración guiada por Ecografía, para localizar con precisión la estructura anatómica que se pretende infiltrar y no realizarlo a ciegas, reduce drásticamente el riesgo de punción vascular y/o nerviosa y la posibilidad de malas infiltraciones en tendones ya lesionados.
La mayoria de los exámenes por ultrasonido son indoloros, rápidos y fáciles de tolerar.