Evalua la rigidez hepática, infiere en forma muy acertada el grado de fibrosis que tiene el hígado. Este estudio se puede realizar en todo paciente que tenga un tipo de enfermedad hepática crónica, desde un paciente con hígado grado, pacientes con patologías por alcohol, pacientes con hepatitis virales, ya sea hepatitis B, hepatitis C, enfermedades autoinmunes, enfermedades de la vía biliar, entre otras.
La mayoria de los exámenes por ultrasonido son indoloros, rápidos y fáciles de tolerar.